Pst, pst... ¿Sabías que las persianas venecianas también tienen sus secretos? De hecho, nos pueden ofrecer mucho más que una protección solar y privacidad. Te contamos 5 curiosidades menos conocidas de las venecianas de aluminio para que puedas sacarles el máximo provecho. ¡Descubre su potencial!
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¿Te gustaría que tus ventanas parezcan más grandes? Elige la instalación en la pared y al medir la ventana deja por lo menos 10 cm de margen a cada lado y por arriba. Esta es también una opción ideal para cubrir desperfectos de la pared.
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Para conseguir una sensación de mayor amplitud en la estancia y reforzar una continuidad visual, usemos las venecianas del mismo color que la pared.
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Las venecianas de aluminio se adaptan a las altas temperaturas y aguantan bien la humedad. Puedes usarlas en cocina o en baño sin el miedo de que se deterioren con el paso del tiempo.
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Las lamas de la persiana se pueden girar en ambas direcciones permitiendo aislar la casa de la entrada del calor o del frío. Para calentar la habitación, se recomienda que la cara cóncava mire hacia dentro y si queremos evitar el sobrecalentamiento, la cara cóncava debe mirar hacia fuera.
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Las venecianas las puedes instalar aun si alquilas un piso o no tienes herramientas para su instalación. Todo gracias a los soportes de sujeción que permiten colocar la cortina en la hoja de la ventana sin usar el taladro para realizar agujeros.