Cómo instalar una persiana enrollable mini: tipos de montajes

La persiana enrollable con el sistema mini o de renovación es una opción perfecta cuando tenemos una ventana sin persiana y no queremos hacer obra de albañilería. En vez de quedar encima de la carpintería, el cajón se coloca por el exterior gracias a que no existe transferencia térmica, lo que permite economizar en gastos de energía. Este sistema nos da muchas posibilidades de instalación que vamos a describir a continuación. En cualquier de los casos, el montaje se lo puede hacer por uno mismo, sin ayuda de especialista. Recordemos que el único elemento para atornillar son las guías laterales que se encajan en el cajón con el paño.

tipos de instalación de la persiana enrollables con el sistema mini

Instalación sobre la fachada

También denominada como la instalación solapada. En este caso la persiana se fija a la fachada de la vivienda, por fuera del hueco de la ventana. Las guías se atornillan a la pared y el cajón sobresale de su superficie. La ventaja de este tipo de instalación es que la persiana no reduce el acceso a la luz exterior asegurando una luminosidad máxima cuando el paño está enrollado dentro del cajón. Por tanto, se recomienda para ventanas pequeñas. Además, podemos elegir entre 3 formas del cajón (angular, redonda y semi-redonda) de manera que se ajuste mejor a nuestra fachada.

Instalación en el hueco de la puerta o la ventana

En este caso el cajón queda hacia fuera de la misma forma que en la instalación solapada pero en el interior del hueco. También está disponibles en 3 formas diferentes. Las guías se atornillan al hueco de la ventana desde el frente o desde el lateral y la persiana queda más pegada al vidrio asegurando un mejor aislamiento. El tamaño del cajón se puede elegir para ajustarlo a la profundidad de nuestro hueco. Una cuestión que hay que tener en cuenta es que incluso al subir la persiana, el cajón va a tapar una parte del vidrio.

Instalación en el hueco a la inversa

La persiana se coloca por dentro del hueco, pero a la inversa, es decir, con cajón situado hacia el interior e invisible desde el exterior. El cajón y las guías atornilladas a la pared lateral del hueco quedan a ras de la pared. De este modo conseguimos una estética minimalista, pero ya no podremos ver la forma del cajón desde fuera. En este caso, hay que tener en cuenta que la profundidad del hueco debe ser suficiente para que el cajón pueda caber dentro. Es también una opción cómoda porque la tapa de registro se la puede acceder desde el interior de la vivienda. Como en el caso anterior, el cajón siempre va a tapar una parte del vidrio.

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